“En Sullana tenemos el mejor banano, en sabor e inocuidad”, dice el agricultor norteño. Lo entrevistamos y esta es su historia.
Huancabamba es como un paraíso. Así lo define. “Todo verde, todo hermoso”, describe. La ciudad es pequeña, pero, por su extensión total, está entre las provincias más grandes de Piura. Limita con Ecuador, Cajamarca y Lambayeque. “Posee los climas de la costa, sierra y selva”, afirma sobre la tierra que lo vio nacer, a una hora a pie de una de las lagunas de las Huaringas.
A seis horas en camioneta está El Cucho, en Sullana, sobre la costa piurana. Agrupa a unas mil viviendas y es donde hoy vive José Correa Cruz y donde cosecha banano orgánico para exportar. Fruto que ha mejorado la economía de varios ciudadanos del norte del país.
De padre ganadero y agricultor, en 1994 migraron. Lo vendieron todo y dejaron atrás los cultivos de papa, oca, olluco y cebada en Huancabamba. José tenía 17 años de edad. “Los padres siempre nos incentivaban al trabajo”, explica por teléfono el agricultor con más de 20 años de experiencia en banano.
Solo conoce Ecuador. Para junio tenía planificado viajar a Alemania, pero por la pandemia no fue posible. Hoy tiene en la mira exportar sin intermediarios, estudiar Negocios Internacionales y que el banano lo lleve lejos.
¿Hasta dónde llega el banano piurano?
El banano piurano llega a Europa, Estados Unidos y Asia.
¿Es uno de los más cotizados?
A nivel de Europa y Estados Unidos, el banano peruano es el más caro, el más cotizado.
Si hiciéramos una tabla de posiciones de producción de banano en el mundo, ¿Perú qué lugar ocupa?
Por calidad, somos los primeros. Y en cuanto a cantidad, los que están primeros son Ecuador y Costa Rica. Si ellos exportan 10, nosotros exportamos de 3 a 4. Pero la calidad nos diferencia.
¿Qué tiene de especial?
Es orgánico, dulce y está cultivado por pequeños productores.
¿Qué diferencia hay entre banano y plátano?
El banano tiene otro sabor. En sus características genéticas, los bananos son AAA y los plátanos ABB o AAB. Los bananos son comestibles frescos. Los plátanos no tanto, son más astringentes.
¿Cómo le ha ido con el banano en la pandemia?
La producción ha bajado en un 30%, pero tal vez en enero empiece a subir.
¿Antes de la pandemia, el banano estaba tal vez en su mejor momento?
Sí, claro, hasta abril.
¿Cómo así se dedicó a la producción de banano?
Soy hijo de un pequeño productor. El año 95 estuve en el tema del banano, en 2003 empecé a trabajar ad honorem para una organización del valle, en 2007 estuve en Pronatur (empresa exportadora), en 2010 regresé a una organización del valle y desde 2017 con los socios tenemos una ‘empresita’ que se llama Agroperú Chira, donde venimos trabajando con los pequeños productores, apoyándolos en temas de fertilización, capacitación y ya estamos viendo lo comercial para 2021.
¿Por qué su familia migró de Huancabamba a Sullana?
Para buscar desarrollo. Lo que sembrabas era para comer. También porque en ese tiempo hubo problemas de terrorismo. Y queríamos educación para la familia.
¿Por qué su padre eligió dedicarse al banano?
Buscábamos parcelas y encontramos el banano. Previamente habíamos vendido todo lo que teníamos en Huancabamba, donde teníamos como 20 hectáreas, más que todo para ganado. Con esa plata compramos una casa en Sullana y las parcelas. Yo lo ayudaba y estudiaba para ser técnico agropecuario.
¿Cuánto ha cambiado su vida?
Agroperú Chira agrupa a 96 productores. Recién estamos empezando. Pero el banano ha cambiado mucho el tema económico desde el 2000. Hasta esa época, la mayoría de productores andaba con su sandalia de caucho. La mayoría bajaba con su burro y su casa era de material rústico. Hoy tienen casa de material noble, carro, andan al zapato. El tema social ha mejorado. Los jóvenes que salen de la secundaria estudian en la universidad, hay más recursos.
Me dice que usted fertiliza con productos orgánicos. ¿Cómo se traduce en el producto final?
Porque el banano es más dulce. Tiene más consistencia. No madura tan rápido o madura parejo. Y sacamos análisis de residuos para ver la credibilidad del producto.
¿Diría que el banano que se produce en Sullana es el mejor que puede dar el Perú?
En Sullana tenemos el mejor banano, en sabor e inocuidad. Esto último se refiere a que esté libre de productos no permitidos o productos químicos.
¿Qué les falta para crecer más?
Nos falta mercado. También apoyo económico, porque solo el tema de certificación nos sale como 18 mil dólares por año. Lo que estamos viendo es, además, llevar capacitación, necesitamos infraestructura para mejorar. Hay que mejorar los atributos de la tierra pero con productos orgánicos, que ahora mismo estamos aplicando en pocas cantidades.
¿Qué es lo más importante para tener un buen producto?
Las buenas prácticas agrícolas.
¿Cómo reconocemos un buen banano?
Se nota en la calidad estética, cuando tiene una buena dimensión, buen calibre y consistencia. La fruta no se hiere muy rápido.
¿El banano que produce se vende más afuera o en Perú?
Lo vendemos más afuera. Aunque depende de los tiempos. Ahorita estamos llevando a los supermercados de Lima, están pagando bastante bien. El tema es que en Perú distribuimos lo que llamamos el descarte de la exportación. Lo mejor se va para afuera.
Pero usted sí debe comer su propio banano.
Mandamos a madurar un banano con manzanas. Y el banano verde lo comemos en chifles, majado de banano o sancochado.
Autoficha:
- “Soy José Amberli Correa Cruz. Tengo 43 años de edad. Nací en la provincia de Huancabamba, Piura. Acabé el colegio y estuve estudiando en el INIA en temas agrarios. Pero de niño soñaba con ser abogado (risas); finalmente, me quedé en el área donde siempre estuve, en el tema agrario”.
- “Tengo cuatro hijos por el momento. Uno ya terminó de estudiar Administración, la otra estudia Enfermería, el otro estudia Sistemas y la última acaba secundaria este año. Y ninguno abogado (risas). A mí me gustaría estudiar Negocios Internacionales”.
- “La meta ahora es lograr un mercado directo. Tenemos una alianza internacional con organizaciones de Ecuador, Filipinas y Francia. Estamos haciendo un estudio de mercado para ver en qué nichos ofrecer nuestro producto. El sueño es exportar de manera directa”.
Fuente: Perú21