La campaña peruana de naranja fresca viene presentando un excelente desempeño en los mercados internacionales en 2023. Hasta el mes de octubre, se logró vender 16.445 toneladas por US$ 8 millones, representado un aumento en el volumen de +70% y de valor en +94%.
Este incremento de las exportaciones peruanas se debió al aumento de las importaciones de los Países Bajos, principal mercado destino, el cual compró 10.147 toneladas por un valor de US$ 4 millones, lo que significó un crecimiento en el volumen de +73% y del valor de +108%. El descenso de las temperaturas en los Países Bajos viene estimulando la mayor demanda por cítricos, especialmente de las naranjas y mandarinas, señaló Erik-Jan Thur, dueño de la empresa holandesa Marni Fruit.
Por otro lado, España, uno de los principales exportadores de naranja fresca, ha venido presentando problemas con sus cultivos. Andalucía, la zona española de donde procede la mayor parte de naranjas, ha venido siendo afectada por las constantes sequías. La cosecha de naranja en el Valle del Guadalquivir, una de las principales zonas productoras, también se prevé que cierre con una reducción de -20% respecto de la campaña pasada. En sí, los bajos rendimientos se deben a la falta de disponibilidad de agua, las altas temperaturas durante las etapas de floración y cuajado, y a las olas de calor en fases posteriores del cultivo de las naranjas españolas.
Por último, cabe mencionar que otro de los factores fue el aumento de las exportaciones hacia el Reino Unido y República Dominicana, segundo y tercer mercado destino de las naranjas peruanas. El Reino Unido compró 2.926 toneladas por US$ 1.2 millones, un aumento de +188% en el volumen y de +322% en valor; mientras que República Dominicana compró 1.119 toneladas por US$ 700,000, es decir, un aumento de +39% en volumen y de +57% en el valor.