Se necesita más coherencia para salir de la crisis. El impuesto solidario y el impuesto a las ganancias.

El país viene trabajando hace 2 meses al 35% de su capacidad productiva alcanzada al 2019. Los más optimistas prevén que en los próximos 2 meses se recuperará el 70% de la capacidad productiva y que recién en el segundo semestre el país logrará trabajar a niveles similares a los del 2019. Estas cifras optimistas contemplan que el Producto Bruto Interno caerá 12% en el presente año.

Para que este pronóstico optimista se dé es indispensable que las empresas sobrevivan. Si las empresas no sobreviven lo que nos espera es el colapso de la economía, esto es, nos convertiremos en algo parecido a Venezuela.

Para lograr que la Economía no colapse se requiere 2 ingredientes igualmente importantes: actitud y liquidez. 

La actitud ha quedado demostrada en la gran cantidad de empresas que en lugar de seguir el camino fácil, “cerrar”, vienen asumiendo altos costos para mantener su capacidad productiva en un contexto de ingresos disminuidos o nulos, y, para implementar los rigurosos protocolos de seguridad  requeridos para operar sin contagio del virus.

Por el lado de liquidez, el remedio no es un secreto, basta con revisar la página web de la OCDE, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, organización que agrupa a los países más desarrollados del planeta y cuya membresía plena constituye uno de los desafíos que ha planteado el Gobierno para el país.  El remedio planteado por la OCDE es que los gobiernos doten de liquidez a las familias y a las empresas través de la implementación de, entre otras, las siguientes medidas: concesión de préstamos blandos, subsidios, libre disposición por las familias del ahorro privado intangible, y, medidas tributarias dirigidas a ampliar la caja disponible de las familias y de las empresas. Todas estas medidas han sido o vienen siendo implementadas con éxito por el gobierno.

Nuevamente, para que la crisis termine, las familias deben disponer de liquidez para poder demandar bienes y servicios de las empresas, y, las empresas deben disponer de liquidez para mantener el empleo, y, con ello, la demanda de las familias por bienes y servicios. En otras palabras, más liquidez genera más empleo, más consumo y reactivación. En contraste, menos liquidez genera desempleo, menos consumo y recesión.

En contra del sentido común, del remedio planteado por la OCDE para combatir la crisis económica creada por la epidemia y del programa de reactivación de la economía que viene implementado el Gobierno, algunos grupos parlamentarios proponen establecer el “Impuesto Solidario” y el “Impuesto a las Ganancias” para gravar a las familias y a las empresas.

El “Impuesto Solidario” pretende gravar con una tasa que puede llegar al 3% los ingresos y/o el valor de la propiedad inmobiliaria de las personas y de las empresas, y, el denominado “Impuesto a las Ganancias” pretende gravar con una tasa que puede llegar al 3% las utilidades y las ganancias de capital obtenidas por las personas y las empresas. Importante mencionar que el “Impuesto Solidario” y el “Impuesto a las Ganancias” se exigirán en adición a los impuestos vigentes que continuarán y que gravan los mismos conceptos, nos referimos al Impuesto a la Renta, al ITAN y al Impuesto Predial.

El “Impuesto Solidario” y el “Impuesto a las Ganancias” antes mencionados no sólo reducirán la liquidez disponible de las familias y de las empresas, generando, con ello, menos consumo, desempleo y recesión, sino también anulará el programa de reactivación económica que viene implementando el Gobierno, que busca precisamente el efecto opuesto, aumentar la liquidez disponible de las familias y de las empresas para generar más consumo, empleo y reactivación de la economía.

Se necesita más coherencia en los Poderes Públicos para resolver la crisis económica. El Poder Legislativo no puede deshacer las políticas que el Poder Ejecutivo implementa. Ambos deben jugar el mismo partido en beneficio del Perú. Noten que los más afectados si la economía colapsara no serán las grandes fortunas, en contraste los más afectados serán los más vulnerables.

Por: Carlos Alberto Krüger Ortiz de Zevallos, Socio de Álvarez del Villar, Belaunde, Carrillo & Krüger Abogados / Mayo 2020

Compartir
l
El país viene trabajando hace 2 meses al 35% de su capacidad productiva alcanzada al 2019. Los más optimistas prevén que en los próximos 2 meses se recuperará el 70% de la capacidad productiva y que recién en el segundo semestre el país logrará trabajar a niveles similares a los del 2019. Estas cifras optimistas […]
9
La verdadera reforma agraria

La verdadera reforma agraria

El sector agroindustrial peruano ha irrumpido en los mercados internacionales. De exportar US$226 millones en 1994, en el 2023 la cifra superará los US$10,000 millones, así en 30 años hemos multiplicado por 44 veces nuestras exportaciones agrícolas.

leer más

Novedades

Lee nuestras novedades y entérate de todo lo que tenemos para informar